domingo, 27 de enero de 2013
Deseos retóricos.
Escalofríos de lata,
entumecidos
y podridos,
alucinando con el calor.
Estupefacto besabas
acaramelándome el alma.
Tu lengua de metal
se dilataba
y retorcía
sobre la piel húmeda que recorría.
¿A dónde vas con tanta ropa,
con tanta prisa,
desperdiciando la sensualidad
que emana tu caminar?
Las uñas negras
de mis dedos dormidos
te detenían.
Tu espalda rígida,
arquitectura de una pasión sicodélica
ahora me perseguía.
¿A dónde me arrastrás tan lento
tan cuidadoso
tan irresistible y prepotente?
No es rabia
ni agonía
mis gritos cuando me colonizas la piel
son auténtica poesía.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario