domingo, 9 de junio de 2013

Paréntesis

A veces porque sí
otras porque la libertad me domina
No me basta con conocer mil cuerpos
ni con festejarte en mis poemas
o escribirte desnudo el pecho.
Ahora ven
que la mente puede ir mucho más allá
y la imaginación puede construir todo lo que no tenemos.
Pero quiero tenerte
más de lo que ya te tengo.
No me sirve tu boca al lado de la mía
hablando a la par 
cantando la misma canción
de melodía abstracta del corazón.
No me basta que me mires 
acribillándome la realidad
y desestructurando todos mis deseos.
Así fue que me resistí
una y mil veces
a reparar en vos.
No me alcanzó con contemplarte desnudo
entregado a tu arte más profundo
y a lo más hermoso de lo que sabes ser.
Reprochándome
enojándome
con el miedo paralizante que me obstruía la mirada
que me detenía a milímetros de tu boca
que me alejaba de tu espalda
que me cerraba los ojos cuando me mirabas. 
No me servís, no me alcanzas, no me bastas, 
con tu hermosura innegable
e hipnotizante
si no asumís que
es recíproco el rechazo inicial
que manifestamos
al mirarnos a los ojos por primera vez
y congelarnos por completo
en el océano de fuego
que nos nació en ése momento.

No hay comentarios: